Cumplí los años ayer

septiembre 30, 2013

    Cumplí los años ayer, pero tengo la edad del tiempo y el no tiempo. Soy eterna, pertenezco al infinito. Vengo de ese primer soplo de creación, vengo de la nada, vengo del todo. Soy parte de la rueda que nace y renace eternamente. Soy un recién nacido y tengo mil años; mi edad no importa. Estuve siempre acá, nací del big bang y aun antes, de la nada y del todo. Llevo en mí la primera partícula de la creación al igual que las estrellas y al igual que vos. Y es por eso que soy una con vos, los dos llevamos la misma primer exhalación que dio vida al todo. Los dos somos parte de ese primer aliento divino, de esa primer partícula de donde se desprendió todo, donde comenzó todo. Y es por eso que te amo, estamos unidos eternamente en un lazo de amor. Sos otra expresión de la misma unidad, no puedo odiarte, sólo contemplar tu manifestación y agradecer que estés ahí al igual que yo aquí. Somos prueba viviente de la primer vibración. Somos esa vibración, somos la luz. Somos diferentes y somos lo mismo.

    Cumplí los años ayer, pero no tengo edad. Y a pesar de eso me sigo asombrando ante la maravilla de estar viva y de latir al ritmo del universo, me asombro como si fuera una niña viendo todo por primera vez. Y eso que ya estuve aquí, y eso que ya vi todo. Y aun así, a cada instante, todo lo veo nuevo. Y gozo con todo, que es perfecto, que es como es. Así como yo, que soy quien soy y como soy. Me acepto así, y de esa manera también te acepto a vos en tu perfección. La imagen en el espejo refleja como soy hoy, pero si sé ver, me miro a los ojos y más atrás de ellos aparece mi alma, aparece toda la creación.

    Cumplí los años ayer, pero eso no significa nada, pues soy una con la eternidad. Y viajo en el tiempo, y floto en el aire donde me uno a la eterna energía, a la eterna luz. Y soy esa energía, y soy esa luz.